Hace unos días, un amigo me comentó que las jirafas son mudas ¡mudas!. No lo sabía, aunque no se por qué no me lo había planteado.
Por lo visto, las jirafas no tienen cuerdas vocales. Aún así, se ha descubierto que pueden emitir sonidos que el humano no puede percibir. Lo hacen a través del infrasonido, es decir, por ondas acústicas que al hombre le resulta imposible escuchar.
Las jirafas son unos animales con unas patas muy largas y finas, y cuello largo para poder comer de las hojas de los árboles. Al no tener cuerdas vocales se comunican a través de gestos y olfato. Por ejemplo, los machos pueden ligar con las hembras con un estornudo.
Otra curiosidad de las jirafas es que son el mamífero que menos duerme, apenas 2 horas al día de media, pero con pequeñas siestas de entre 5 y 10 minutos.
Además, las manchas que vemos en su piel son muy singulares. Es decir, no existen dos jirafas que tengan las mismas manchas, lo mismo que ocurre con las huellas dactilares para el ser humano.
¡Es curioso!