La función de la lengua es mover la comida por la boca, para así ayudar a una mejor digestión.

La lengua de los gatos es áspera por estar formada de diminutos nódulos duros, que le permite limpiar muy bien la carne de los huesos y limpiarse más eficazmente su propio pelaje y el de sus crías. Los gatos se consideran ser unos animales solitarios lo que necesitan su lengua para obtener una higiene individual. A diferencia de los perros, que se consideran ser unos animales sociales lo que ellos se suelen limpiar unos a otros.