¿Sabías que hay peces que no se congelan?
Como sabemos, los peces viven en cualquier océano, desde los océanos donde las temperaturas son altas hasta océanos tan helados como el Océano glacial antártico.
Aún así no son todos los peces los que pueden vivir en aguas tan frías, por ejemplo los peces que pueden resistir a las bajas temperaturas del Océano antártico son los peces óseos como los «bacalaos antárticos».
Algunos peces antárticos pueden vivir en aguas a -2ºC, no llegándose a congelar el agua a éstas temperaturas por el gran contenido de sal. Éstos peces tienen ésta capacidad de vivir en éstas aguas por que su sangre está compuesta de una especie de anticongelante biológico que le permite vivir en aguas de menos de 0ºC. También su sangre carece de glóbulos rojos, lo que hacen que sean transparentes.
¿Por qué el agua del mar es salada?
Es curioso como normalmente llamamos «la tierra» a nuestro planeta cuando en realidad está compuesta por más agua que por tierra, ya que más de dos terceras partes de su superficie están bañadas por agua.
Desde nuestro origen el agua está en un constante movimiento, desde los continentes hasta los océanos formando lo que llamamos el ciclo del agua, gracias al sol. El ciclo del agua consiste en la evaporación del agua líquida que se encuentra en los continentes y océanos, subiendo el vapor del agua hasta la atmósfera. El viento transporta éste vapor de agua a grandes distancias hasta que por determinados factores se condensa en nubes y caiga del cielo en forma de lluvia o nieve. Después el agua cae a los océanos, o a la superficie terrestre que a través de los ríos comenzando otra vez el ciclo del agua.
Hace millones de años la tierra era como las regiones volcánicas, era casi todo fuego y ácido. Se producían lluvias ácidas producidas por el gran número de volcanes, que al chocar con las rocas de la tierra las disolvieron y las redujeron a sales, llegando dichas sales a los océanos por los ríos. Después de tanto tiempo, el agua del mar sigue siendo salada por el ciclo del agua antes comentado.
Aunque llamemos el agua de los ríos «agua dulce» en realidad ésta agua también está compuesta por los minerales del agua del mar pero en menos proporción, ya que éste agua está en constante movimiento y las sales que llegan al océano se quedan ahí más tiempo por su gran tamaño.
¿Sabías de donde procede el nombre «canguro»?
Nos referimos a los canguros como aquellos animales herbívoros con origen australiano pertenecientes a la subfamilia Macropodinae.
El nombre «canguro» fue escrito por primera vez en 1770 pero en versión inglesa «Kangaroo» por el Capitán James Cook. Todo surgió cuando los navegantes ingleses dirigidos por éste llegan por primera vez a Australia, y al ver a éstos curiosos animales saltando con sus dos patitas se quedaron fascinados. Lo que contactaron con los nativos y a través de señas les intentaron preguntar por el tipo de animal que era, a lo que los nativos siempre les respondían «Kan Ghu Ru». Así se adoptó el vocablo inglés «Kangaroo» para referirse a estos animalitos. Tiempo más tarde se descubrió que el verdadero significado de la palabra «Kan Ghu Ru» en el idioma de los pueblos Australianos era «No le entiendo».
¿Por qué vemos el agua del mar azul?
Se dice que el agua líquida no tiene color, que es transparente, sin embargo vemos que el agua del mar es azul lo que nos hace pensar el motivo.
Se dice que el agua del mar es azul porque se refleja el cielo, pero si fuera así cualquier cantidad de agua que tengamos al aire libre tendría que ser azul. Aunque la explicación del color azul del mar tiene que ver con la explicación del color azul del cielo (en un post anterior explicamos el color azul del cielo). Todos los objetos son iluminados por luz blanca y serán de un color u otros dependiendo de los colores de la luz blanca que absorban es decir, un objeto será azul cuando absorbe todos los colores que forman la luz blanca menos el azul.
Así el agua del mar la vemos azul porque absorbe más cantidad de otros colores cálidos que fríos, llegando su proporción a nuestra retina.
¿Por qué hay olas en el mar?
Como sabemos, las olas son unas ondas que se mueven por cualquier superficie donde haya agua, aunque donde más se aprecia es en el mar. Existe olas de diversas alturas, desde milímetros hasta alturas de 30 metros (como una altura de un edificio de 12 pisos).
Las olas se pueden producir por diversas causas. Normalmente las olas son provocadas por el viento ya que arrastra el agua produciendo arrugas en la superficie del agua, rompiéndose por la gravedad. Las olas seran más grandes cuanto más extensa sea la superficie del agua ya que el viento se mueve más rápido al no ser frenado por tierras cercanas. La luna puede también afectar a las olas, puesto que atrae el agua del mar conforme la tierra gira sobre su eje haciendo que en determinados momentos suba la marea.
Existen varios tipos de olas causadas por el viento como son las olas libres u oscilatorias, las olas forzadas y las olas de traslación. Además hay otro tipo de olas acusadas por los terremotos o erupciones volcánicas submarinos que son los Tsunamis, que provoca una sola ola de grandes dimensiones (pueden alcanzar los 20 metros de altura) y recorre distancias a gran velocidad. Los Tsunamis suelen aparecen en el Océano Pacífico, frecuentemente crean grandes desgracias como lo ocurrido en Japón en 2011.